CARNICERÍA VAL: ARTESANÍA Y TRADICIÓN
Partimos de un establecimiento activo desde 1946 que se encuentra dentro de en un edificio construido en dicho año. Uno de los principios más importantes que rigen el negocio es el proceso de elaboración artesanal, por lo que este concepto se convirtió en la IDEA principal del proyecto. El edificio en sí mismo ya es artesanal, por lo que se respetó lo máximo posible tanto exterior como interiormente.
En el exterior, se modificó la entrada al establecimiento, pero manteniendo la modulación original de la fachada. Debido al reducido tamaño del local, el interior se redistribuyó de forma más eficiente, sectorizándolo longitudinalmente en tres franjas según su función y usos: preparación, venta y clientes. Las divisiones necesarias se resolvieron con vidrio sin carpintería, otorgándoles a todos los espacios una mayor continuidad visual y por tanto una mayor sensación de fluidez y amplitud.
Además, se pusieron en valor los materiales nobles existentes, que refuerzan el concepto del proyecto y el buen hacer tradicional y artesano del establecimiento.